lunes, 8 de febrero de 2010

Agua para elefantes de Sara Gruen


Definitivamente recomendamos el libro. En nuestra humilde opinión, es un libro ameno, entretenido, casi todo el tiempo mantiene el deseo de seguir leyendo, de esperar algo más de la historia, a pesar del personaje de Jacob, un poco gris a veces, otras un poco falto de carácter y a veces, sobre todo cuando es ya un viejito, un poco más dinámico y que por supuesto nos llena de ternura. Y repito: en nuestra humilde opinión. Nada de crítica literaria, aguda, científica u objetiva, nuestra humilde opinión es plena de subjetividad, gustos, y puntos de vistas. Como grupo, sobre todo después de tantos años, la mayoría de las veces nuestras opiniones de manera general coinciden, a sabiendas de que la individualidad y singularidad prevalecen y es eso lo que más enriquece nuestras discusiones. Así, coincidimos en que la lectura fue agradable, que indudablemente es un libro bien escrito, con una estructura literaria bien integrada, que denota considerable investigación por parte de la autora (quien, supimos terminó de escribir este libro encerrada en un closet en busca de mas privacidad), y que nos muestra sobre todo, lo que uno necesita de un buen libro, anécdotas, leyendas, historias desconocidas, realidad o ficción pero que te adentren en un mundo nuevo, un festival de personajes diferentes, con características disímiles, que odiamos y amamos, y que son quienes nos dan la mano para llevarnos a ese circo, a ese tren, a esa época. A la mayoría el final les pareció un poco increíble y de solución apurada, pero vaya usted a saber que pretendía la autora, nosotros realmente no nos dimos cuenta, así que asumimos que Jacob lo soñó, que es una metáfora, o una alucinación.

Por otra parte, y no menos importante, les cuento que nuestra reunión estuvo “bien buena”. La responsable de la comida no cocinó, nos trajo unos burritos muy sabrosos y un arroz calentico, pero hacemos constar que fue comprado. Razones: justificadas. Nuestra próxima anfitriona viene al rescate de la práctica y a la revancha, ha dicho “que nadie lleve nada que todo va por mi”, y nosotros tan contentas. Pues este también es nuestro disfrute, saborear el arte culinario de cada una, que siempre es muestra de nuestras tradiciones (aunque hay algunas que no les guste cocinar, siempre puede ser encargado).

No nos faltó la emoción, el minuto hermosísimo de compartirnos, de ser amigas, confidentes, y apoyarnos. Esto sí es un pedazo de nuestra más linda intimidad, pero ya saben, cosas de chicas adultas, de unas perpetuas asombradas que leen libros y se llenan de aires renovados y perdurables.

P.S. Todas las perpetuas desordenadas, a excepción de una, (y la anfitriona por supuesto) llegaron tarde…
Ah y aqui pueden enterarse un poquito mas: http://www.alfaguara.santillana.es/libro/agua-para-elefantes/1225/

3 comentarios:

  1. Veo que ninguna asumío la tarea de escritora para ayudarte en esta empresa. Pero estoy deacuerdo con tu critica, tus tachados me hicieron reir, ja, ja, a la vez que espero superar ese trauma y deleitarlas con mis habilidades culinarias para la proxima reunion que este de voluntaria.. Y recuerdo que fui la tercera en llegar pero tengo excusa...estaba comprando taquitos frescos??

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  2. Chica!!!!!!!!!!
    Oye los tacos estuvieron buenos!!!Pero unas ricas arepitas serian geniales!!!!
    Besitos

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  3. Esto estuvo muy bueno!

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