jueves, 30 de septiembre de 2010

Mi pájaro azul

"…el tiempo es un balcón, donde
se posan las palomas del recuerdo…"       
Manuel Vidal (Cuba, 1929-2004)

Se fuga Septiembre y se lleva a su antojo las jornadas revividas. Pájaros, ballenas, manatíes y palomas preparan sus audaces bártulos sin que les angustie una voz, un día miserable o las ausencias. Septiembre se va con toda las lunas que se ahogaron en la plata soberbia del mar. Allí donde estés, donde pusiste tus raíces, tu lágrima necia, tu esquela debajo de la piedra, allí volverás, allí harás nido como hacen los pájaros el resto de sus cortas e intrépidas vidas. Donde tu corazón duerma su primer invierno, volverás para sosegar tus alas. Septiembre vino con el ahogo de la prisa y la ternura del abrazo.
A veces crees que solo con dejarte llevar, alcanzarás. Pero hay que aletear, posarse y confiar. No quiero que lo escaso nos abrume y lo irrisorio nos aparte arrasando con nuestros pájaros azules. Quiero estar aquí, mover mis dedos sin freno, no resignarme a la fatiga inexistente, las voces y monomanías, pero no sé, no sé, no sé…
Octubre se convertirá en el día placentero de mañana, y volveré a sujetar algo de esta parte que soy porque tú la posees. Yo soy feliz así aunque sobrevuele con zozobra. Yo tengo esta desheredada destemplanza dentro y no la puedo mover o derribar, pero los amo.

"…hay un pájaro azul en mi corazón que
quiere salir
pero soy duro con él,
le digo quédate ahí dentro, no voy
a permitir que nadie
te vea…
…hay un pájaro azul en mi corazón que
quiere salir
pero yo le echo whisky encima y me trago
el humo de los cigarrillos,
y las putas y los camareros
y los dependientes de ultramarinos
nunca se dan cuenta
de que esté ahí dentro…
…hay un pájaro azul en mi corazón
que quiere salir
pero soy demasiado listo, sólo le dejo salir
a veces por la noche
cuando todo el mundo duerme.
le digo ya sé que estás ahí,
no te pongas
triste…
…luego lo vuelvo a introducir,
y él canta un poquito
ahí dentro, no le he dejado
morir del todo
y dormimos juntos
así
con nuestro
pacto secreto
y es tan tierno como
para hacer llorar
a un hombre, pero yo no
lloro,
¿lloras tú?"

Charles Bukowski (Estados Unidos 1920-1994)

sábado, 18 de septiembre de 2010

“Las criaturas de islas…”




“Se me ha anunciado que mañana,
a las siete y seis minutos de la tarde,
me convertiré en una isla,
isla como suelen ser las islas.
Mis piernas se irán haciendo tierra y mar…”
                                           (Virgilio Piñera)



“Al pie de las murallas
el aire tartamudo
desliza sus sirenas,
plata mansa sin hoy
mana sus lunares
entre lunas cansadas
sin balcones. ¿Qué será,
qué será? Bajo el arco
y pestañas, la tarde,
-codorniz de Ceilán -rompe
en flechas sus colores.”
                                        (José Lezama Lima)



“Me naces de repente
en la alta luz herida
que entrega al alba el cobre
de tu color trigueño.
Olvido la distancia y sueño que te habito.
Me llegas en la llama
y en la flor y en el viento.
Mi corazón te ciñe de amor cada mañana,
patria de las espumas,
tierra pequeña y tibia.”
                                    (Rafaela Chacón Nardi)

 




Mi Isla tiene un verde limpio
La Luna baja a sus riachuelos
a lavarse la cara
y a perfumarse el pelo.
En los frescos valles de mi Isla
Hay fuego de perfumes
Y éxtasis de románticas palmeras”
                                          (Ernesto Víctor Matute)


Va al mar, viene del mar y mares pequeñitos se amansan en su pecho, duermen a su calor, como palomas.
Los ríos de la isla son más ligeros que los otros ríos.
Las piedras de la isla parece que van a salir volando…
Ella es toda de aire y de agua fina. Un recuerdo de sal, de horizontes perdidos, la
traspasa en cada ola, y una espuma de barco naufragado le ciñe la cintura, le
estremece la yema de las alas…
Tierra firme llamaban los antiguos a todo lo que no fuera isla. La isla es, pues, lo menos
firme, lo menos tierra de La Tierra…”
                                               (Dulce Maria Loynaz)




jueves, 16 de septiembre de 2010

Ricas y famosas…

y amadas…Era la edad de pretenderlo. Mis recuerdos de aquellos sueños están llenos de ternura, de alegría, de gozo. No había nada de superfluo o mezquino, nada de tóxico ni presuntuoso, eran solo eso: sueños de adolescentes. Fantasías que nos endulzaban, nos aletargaban y nos alejaban por unos momentos de la escuela, las normas y el advenimiento de las responsabilidades. ¿Quién no lo vivió?
A mí, personalmente, no me importaban demasiado los finales felices, siempre que la película desbordara pasión, revelara arrebatos y me dejara seca de tanto sollozo. Estas fueron dos de la década de los 80 que veía una y otra vez. “Ricas y famosas” fue una de las imaginarias vidas que tendríamos una de mis mejores amigas y yo. Nos sabíamos cada escena, cada diálogo, cada abrigo de piel, cada pelea que durante veinte años libraron juntas y alejadas, pero manteniendo su amistad firme, fieles a las promesas que se hicieron en su juventud, y viviendo cada circunstancia con mucha intensidad.


Y qué decir de la angelical Amy Irving, queríamos ser tan bellas como ella, tan sordomudas como ella en “Voces”, donde interpreta una enamorada bailarina que finalmente triunfa en su profesión y en el amor de la mano del músico Michael Ontkean, al que nunca mas volví a ver. Un triunfo del amor en dos mundos diferentes: la música y el absoluto silencio.

martes, 14 de septiembre de 2010

¿Qué soy sino lejanía?


Donde habitaban las páginas trilladas estás tú.

Maratones de ausencia presagiaron
las letras que perpetuamente
se llevaron tu voz.
A través del cristal el sonido del agua
soy todo lo que dejaste tocar, todo lo que renunciaste sentir.
No volvieron las tertulias los cigarros la marea de gritos.
Todo fue la misma cosa, simulacro, quimera.
No es la voluntad lo que descansa sobre el muro
es la vida
y nada más.
Tarde para murmurar más arrojos, bravuras
defenderme con la avenencia del alba
¿Qué soy sino lejanía, el desconsuelo en pedazos
la congoja de otros, el recuerdo de una ola
el rostro mío en tu espejo?
Este libro me sacó del mundo y te repuso
estas páginas trilladas donde estás y no
lejanas aventuras de mar y sonidos
donde arrojamos todo
y nada.

      

miércoles, 8 de septiembre de 2010

La otra (X). Una carta sobre las aguas del río.

“Cada vez que tienes la oportunidad de hacer alguna diferencia en este mundo y no lo haces, entonces estás malgastando tu tiempo en la Tierra”. Roberto Clemente.

Siempre le llamé Picon. Dice mi tía que porque los escuchaba decir a ellos Pipo.

Yo te conocí así, hemipléjico y temerario, increpándole al mundo tu molestia y tu inconformidad. Por esa vez nada podías lograr con tus ideales, no te harían regresar a una vida normal, no te harían volver a caminar. Así que todos, menos yo, pagaron las culpas y sintieron el peso de tu voz y tu tormento caer sobre sus cabezas como martillazos imparables. Tu travesía por esta vida fue corta pero firme. Eras noble y vehemente, te casaste con la mujer que amabas, fundaste tu familia y guerreaste preservando los ideales por los que creíste que el mundo sería un poco mejor. Los mismos ideales que con cincuenta y cinco años te abandonaron derribado en un monte, luego en una camilla en un salón de operaciones, en hospitales tratando de rehabilitarte y finalmente en una pequeña cama en el cuarto de criados jugando a la magia con tu nieta. Guerreamos juntos por doce años más, procurándonos, el uno al otro, horas de esparcimiento mientras mami deambulaba en la cocina, disponía comidas, lavaba la ropa de todos y atendía a cuanto vecino llegaba. Nuestro mundo se llenó de libros, monedas conseguidas de las orejas, juegos de cartas, frases comunistas y algunas historias mal contadas. Escasas visitas, dolores raídos en tu alma, acumulados como trapos viejos, húmedos y fétidos. Los peores días emergía una espuma blanquecina por tu boca mientras yo corría desesperada a la casa de abajo donde ya me esperaba resguardo. La rutina emergía cada mañana porque la rutina, como tu decías era la que hacia la vida de un hombre. Las cuentas, el trabajo, la entrega. “...Llevé el cine a lugares donde nadie ni sabía que existía, luché y aguanté cárcel por esta Revolución, me fui al despacho cada día para trabajar para... sin importarme noches, ni domingos, ni nada, cuidé de todos los presos allá en La Cabaña sin maltratar a nadie, ayudé a sus familias, y me fui allí a buscar lo que ... quería, y mira tú…ahora quién se acuerda de nada de eso, hecho una mierda yo aquí tirado…Hilda, Hiiildaaa…si agarro la pistola chica te juro que me mato...” Nunca te vi sonreír.
Mami te alimentaba cucharada por cucharada, te arrastraba con todos aquellos hierros en tus piernas hasta tu silla de ruedas, reía contándote historias, montando una conversación trivial para sacarte la ganas de vivir y tú no te inmutabas, desparramabas tus amarguras con todas tus fuerzas y la dejabas exhausta. Pero como nada la vencía se sentaba en el sillón de madera a tu lado de la cama, me cargaba y yo me dormía en sus brazos escuchando los murmullos de tus pendencias y el susurro de su tarareo sintiendo que estaba protegida. Mis dos guerreros blindados a mí alrededor, con sus panoplias y escudos cuidando el sueño de la amada. Cuando te fuiste la rabia me dejó magulladuras. No te vi y no verte fue una angustia penetrante. Pero te escribí cartas, muchas, como esta, que nunca leíste, pero que de vez en cuando me renovaron el sabor de una tarde contigo en medio del ruido de la lluvia haciendo huequitos en las aguas del río, ¿te acuerdas?














(Fotos del  Río Almendares, La Habana, tomadas de internet)

domingo, 5 de septiembre de 2010

Mis fotografías: Guanajay

Después de la última “división político-administrativa” (año 2010) propuesta por el gobierno cubano el municipio/pueblo de Guanajay ahora es parte de la provincia Artemisa. En Guanajay no nacieron los guanajos (como decíamos los niños de la Habana) en Guanajay creen que el nombre se debe al “lugar donde hay el agua” y esta creencia data desde la época de los aborígenes. Guanajay fue fundado en 1650, año escogido después de que muchos historiadores analizaran la documentación histórica disponible pues no se cuenta con un acta de fundación como en muchos otros asentamientos. Es un pueblo grande, lindo, rico culturalmente, con tradiciones llenas de apego a la tierra, a la comunidad, a la familia. Yo estuve hace poco, después de un montón de años. Allí nacieron, vivieron y se casaron mis suegros hasta que la “Revolución” les entregó su apartamento de tres cuartos allá en los edificios de “cajas de fósforos” de San Agustín.

El territorio de Guanajay lo atraviesa una cadena de pequeñas montañas conocidas por El Jobo, que dejan distinguir el bello paisaje de la campiña cubana y los siempre asombrosos palmares nacidos en las laderas de las colinas y extendidos a campo traviesa. El Río Capellanías baña la zona y a su alrededor crecieron las primeras poblaciones. Durante muchos años se ganó el sobrenombre de la Atenas de Occidente por su auge cultural, desarrollo literario, florecimiento de publicaciones periódicas, y un notable crecimiento urbano. Era un pueblo próspero, según me cuenta la familia.

Hoy lo que he visto es lo que les dejo aquí. Entramos al pueblo por la primera entrada, conocida como la “carreterita del ojo del agua” , viniendo de San Agustín por la calle 25 y tomando “la autopista” o “seis vías”. Esta entrada nos acorta el camino hacia el reparto “Gelabert”, donde vive la familia. No tengo fotos del centro del pueblo, del parque, la Iglesia o el Teatro, donde siempre las antiguas y exquisitas construcciones aun dejan ver la belleza a pesar de la realidad donde se encuentran. Pero tengo estas fotos, que me dicen otras cosas. Para la gente de Guanajay, y del reparto Gelabert.


miércoles, 1 de septiembre de 2010

Las chicas del perpetuo desorden...

… regresamos del verano todas resplandecientes y listas para hablar como periquitos. Los libros del verano fueron un éxito, entre las críticas y los elogios. “Mosaico” de Soheir Khashoggi fue una lectura amena, fácil, que nos atrapó sin misterios pero con deseos de conseguir un final mas verídico. A la historia le faltó dramatismo, suspenso, emoción, y diríamos que hasta un poco de realidad. Los personajes pudieron ser mejor armados y tener además de físico un poco de sentimientos. Hubo quien recordó a Corín Tellado, pero una mejor versión, moderna y de problemática actual. La trama, el tema, la historia, es buena pero no lograda. Quedó mucha tela por donde cortar, mucho jugo por exprimir. Pero todas las chicas estuvieron satisfechas de haberlo leído, actualizarnos frente al mapa acerca de Jordania y escuchar algunas de nuestras propias experiencias. El otro libro, sin dudas, solo necesitó de un buen estómago para enfrentarse al morbo del hombre, pero cuando tomas entre tus manos una escritura como ésta, una letra tan aguda y recóndita, una historia que sangra vida por todas partes, uno siente que vale la pena leer: “Memoria de mis putas tristes” de Gabriel García Márquez.
La mayoría coincidió en que es difícil comenzar a leer algo en que desde el inicio sientes que es aborrecible: un viejo verde de noventa años cuya fantasía es tener sexo con una niña de catorce y además, virgen. Aquí, ya estaría en la filita del “dead road”. Pero es gratificante cuando puedes apreciar la valía de un autor exponiéndote en carne y hueso, vívidamente, toda la humanidad y crueldad de un simple viejo lleno de bondad y aberración a la vez.
Además, como siempre, recordamos cumpleaños, cortamos tortas y soplamos velitas, describimos los últimos acontecimientos, referimos todos los eventos familiares del verano, los viajes de vacaciones, el comienzo de la escuela, los hijos que se fueron a college, los perros enfermos, los síntomas de la pre-menopausia, acordamos las próximas citas para ver a A. en el teatro y celebrar el cumples de R., y las próximas metas, entre chistes fríos y calientes. En dos semanas nos vamos a reunir para seleccionar los nuevos libros del año 2010-2011, como cada septiembre. Esa reunión siempre es buenísima, ver a cada cual tratando de vender la lectura de su libro, y para este año tenemos algunas ideas diferentes, ser más cuidadosos al escoger temas, regiones, tipo de lecturas, por eso andamos releyendo las listas históricas del Book Club. Nada, amigos, que este club está cada vez más arriba, claro sin perder nuestro carácter: el perpetuo desorden de las chicas.

Nota: Se aceptan sugerencias. ¿Has leído últimamente algún libro que nos debas recomendar?
Otra nota:“los eventos familiares del verano, los viajes de vacaciones, el comienzo de la escuela,… los perros enfermos, los síntomas de la pre-menopausia",…entre otros me han mantenido un poco alejada de este lugar que tanto me gusta. Las aguas van tomando su nivel y yo seguiré por aquí. Gracias a los amigos que me han preguntado. No, no estoy vaga, ni he dejado de tener ganas de escribir, ha sido solo eso…algunos días.