miércoles, 20 de enero de 2010

¿Hacer la guerrita a las libritas?


Ayer en la mañanita me fui al “gym”. Me levanté con la conciencia rota y obligándome a considerar mí autoestima deteriorada a ver si de esta manera me decidía, después de buen tiempo de distancia y rencor, a regresar al gimnasio. No surtió efecto el artilugio. Nada de eso. Tenía ganas de acostarme a dormir otra vez cuando terminara los trajines diarios del café, el desayuno, y la despedida en la puerta. Y regresé a la cama, me tiré de un lado, del otro, encendí el televisor, me puse la almohada en la cara, pero tampoco quedé sosegada y como un bombillo a punto de fundirse al que solo le distingues la última centellita parpadeante, me levanté y me alisté. Y me fui a la clase de “bodypump”. Allí tenemos un montón de “body-s”: bodybump, bodylive, bodycombat, etc. Lo que no tenemos algunas es el body propicio. Pero ahí estamos. Los motivos para que las mujeres vayamos al gimnasio son muchos. Aunque todas creemos que el motivo siempre es el mismo: el peso. Algunas vamos a perder unas libritas de más, aunque en ello se nos va la mitad de la vida, los salarios y el tiempo. Otras van a mantener el que tienen y mostrarlo con orgullo, que esas tampoco faltan, y eso la verdad, está muy bien y cada cual es libre de hacer lo que quiera. Algunas socializan un poco o mucho, crean sus grupos para ir al gimnasio en compañía, luego se toman un café o almuerzan quizás más calorías de las que perdieron. Una muchacha me dijo un día que iba por varias cosas juntas a la vez, mantener el peso, estar saludable, socializar y encontrar novio. Ella estaría muy feliz si los gimnasios aún fueran como en la antigua Grecia. La palabra gimnasio viene del griego gymnos que significa desnudez, y el vocablo gymnasium designaba el lugar para ir desnudos. También eran facilidades de entrenamiento y lugares donde se socializaba y se debatían ideas. Pero principalmente era donde hacían ejercicios físicos los jóvenes. Allí se competía desnudo para dar más realce a la figura humana (esta chica realizaría todos sus aspiraciones), porque allí la belleza era un atributo de los dioses, no como hoy en día que es prácticamente una propiedad no solo de los gimnasios sino también de cirujanos, estilistas, diseñadores y algunos degenerados. Además hay para todos los gustos, aquellas que gustan de los ejercicios en las máquinas, las clases grupales, ya sean los “body” de mi gimnasio o el yoga, o la zumba, o el spin. Y claro hay gimnasios, ya sabemos, que tienen otras opciones, piscinas, saunas, baños de vapor etc. Muy listos los dueños de los gimnasios, mientras más lujos mejor, y luego a ver cómo te zafas de las mensualidades, y eso lo digo con condición y naturaleza, nada de cuento, pues ya lo he vivido. En fin, que me espabilé, finalmente me decidí, fui, estuve allí una hora completa, la primera media más o menos activa, la segunda media hora a punto del desmayo, y cuando salí, llamé a mi amiga Charo para decirle que ella también necesitaba ir al gimnasio por su salud, y para acompañarme. Hoy me voy otra vez y con Charo. No sé si solo trato de hacerle una guerrita a las libritas extras o si trato de aliviar mi conciencia, o no hacerme jugo la cabeza pues aun tengo un contrato idiota de 3 años pagados, lo que sé que no se puede ir sin coraje, hay que ir a divertirse, a pasársela bien, y a mí, como apuntaría el Dr. Julio “me cuesta un huevo”. Me gustaría poder creer en lo que me decía mi abuela de que no estoy “gordita” sino “llenita”, “hermosa”, que ¿para qué quieres niña un culito de corazón?”. Les cuento que ahora me voy otra vez a hacer la guerrita. Para el día 1ro de Marzo quiero solo 10 libritas menos. ¿Qué les parece? Ya me enlisté una meta más para el 2010. Ya les contaré. ¿Y tú por  qué vas al gym?

1 comentario:

  1. Una amiga sin acceso a internet (sabran por que, no?) me envio este comentario y me pidio que lo pusiera. Gracias mi "socia Manola", tu como siempre no me dejas caer...
    Ella dijo:

    Te respondo esto!!!!. mira no se si no es porque no he tenido ningun
    contrato pagado, o porque a veces no dispongo de lo que cobran aqui, o
    porque no encuentro el tiempo para ir, pero me muero de ganas de poder ir
    al gimnasio, como hacia antes, mucho antes cuando no tenia niños, y a mi
    pienso que no me cuesta trabajo el ir, mas bien cuando empiezo me envicio
    y no quiero faltar ni un solo dia. Pienso que me gusta ir mas que por
    perder peso porque cuando salgo me siento la cabeza aliviada, como en el
    aire, flotando se me olvida todo, y lo otro y en secreto porque alli
    compruebo que no estoy tan mal cuando miro que las hay mas jovenes y
    deformes e iguales de mi edad que estan mas en candela que yo.

    En fin socia que aprovecha el famoso contrato de 3 años que ya pagaste y
    que tienes el tiempo y todo lo demas para ir..y ponte buena!!!

    no dejes de mandarme las demas entradas.
    Tu socia Manola"

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